¿De nuevo empañado tras la ducha?
Has salido de la ducha y es imposible afeitarte porque está todo el espejo empañado… ¿Quieres que no te vuelva a pasar?
Utiliza este truco casero… Aplica sobre el espejo un poco de espuma de afeitar y frota con un paño seco hasta que no queden restos.
En la próxima ducha, comprueba la diferencia.
Deja un comentario